El ‘Plan Distrital de Desarrollo 2024-2027 - Bogotá Camina Segura’, ha visionado a Bogotá como “la ciudad del bien-estar y de la igualdad de oportunidades” (2024). Caminar y transitar seguros hacia la concreción de esta visión supone, primeramente, concertar ciertos conceptos. No solo la baja capacidad del ingreso sino la falta de acceso a servicios básicos, vivienda, educación, salud, o incluso al espacio público constituyen factores de disparidad social, ambiental, cultural y económica. Lo anterior es sustancial, más aún cuando se reconoce que son fines esenciales del Estado “servir a la comunidad, promover la prosperidad” así como “(…) mantener la integridad territorial” (CPC, art. 2, 1991). Del mismo modo prevé en su artículo 5. “el derecho a una vivienda digna” (Ibid., 1991), y resalta además la función social y ecológica de la propiedad.
Además, es razón esencial de la política pública, contribuir intencionalmente a la atención de aquellas problemáticas de interés público y generar beneficios por el bien de la sociedad. Bajo esta premisa, la Secretaría de Hábitat busca avanzar en el diseño e implementación de políticas que, en su sentido más amplio, contribuyan a la reducción de las vulnerabilidades (hábitat y vivienda; climáticos y ambientales; sociales y económicos; seguridad), y den respuesta a las problemáticas de segregación espacial y reviertan los ‘desequilibrios territoriales’. Así las cosas, que el Distrito oriente y propicie las condiciones necesarias de un hábitat digno, seguro y resiliente, con acceso a bienes urbanos resulta vital para nivelar la cancha de las oportunidades y promover desarrollo.
Gráfica X. Visión PDD, Estado y políticas SDHT Nuestra narrativa de ‘Revitalización del hábitat’

Fuente: Elaboración propia, 2024
Las administraciones locales enfrentan el desafío de implementar políticas de impacto duradero en mandatos de ‘corto plazo’. El enfoque tradicional (rígido) suele negar esta condición, y tiende a generar resistencias por parte de las administraciones subsiguientes. No en vano, grandes proyectos urbanos suelen verse frustrados, bien sea por cambios de visión o por percibirse como impuestos. ¿Es posible pensar en un modelo alternativo, amplio de gestión de ciudad que se renueve cada cuatro años, y se adapte a las visiones de administraciones entrantes? Proponemos sincerar la conversación y reconocer estas dinámicas de coyuntura, y brindar entonces una 'caja de herramientas' que: (i) viabilice la gestión y ejecución de obras durante el cuatrienio, y agreguen valor desde la escala local; y (ii) que siente una base sólida de políticas duraderas, aunque susceptibles de ser refinadas o mejoradas por las administraciones subsiguientes, y que se ajusten a las necesidades conforme el paso del tiempo. Nuestro enfoque busca ofrecer, una tercer vía de gestión pública para la construir de ciudad.
Construyendo sobre lo construido: revitalización y vivienda
- Plan de Desarrollo del Distrito 2024-207: El PDD, en línea con lo señalado por el POT (art. 5), señala que no solo la construcción de nueva vivienda y espacio público garantizan un proceso exitoso de revitalización, sino que ésta debe promover transformaciones urbanas que revitalicen el entorno en zonas de deterioro, brinden seguridad y equidad para todos, asimismo, que preserven los tejidos sociales y los derechos de propietarios y moradores.
- Política Pública de Gestión Integral del Hábitat: La PIGH se encuentra orientada a mejorar las condiciones de urbanas y rurales de la ciudad gestionando el territorio integralmente, y plantea como objetivos: (i) Promover del acceso y disfrute a territorios de calidad y del cuidado; y (ii) generar de herramientas que faciliten la producción, acceso y mejora de soluciones habitacionales. Frente al primer objetivo, es necesario garantizar los soportes urbanos requeridos, y paralelamente incorporar criterios de construcción sostenible, ecourbanismo, reverdecimiento, el cálculo de la huella de carbono para el sector vivienda, y medidas de incentivos para la movilidad sostenible. Avanzar hacia el segundo objetivo, implica reconocer el rol de la vivienda como pilar central de desarrollo de la revitalización, promoviendo la oferta, incentivando y habilitando desarrollos, gestionando suelo útil para construcción de VIS, reducir las barreras de acceso a la vivienda y fortalecer la capacidad de ingreso de los hogares, entre otras. Del mismo modo, es urgente activar mecanismos alternativos para el desarrollo de nuevas soluciones de vivienda como lo es el reúso de edificaciones, lotes con servicios, o producción publica de vivienda (Alcaldía Mayor de Bogotá, 2022).
En virtud de lo anterior…
La Secretaría Distrital de Hábitat (SDHT), para estos cuatro años de administración ha establecido la vivienda y la reurbanización como ejes de la ‘revitalización urbana’. El enfoque considera que “alrededor de esta estrategia, se podrían desarrollar acciones de mejoramiento de entornos, de barrios, de acceso a servicios públicos y por su puesto de gestión del suelo para vivienda nueva, equipamientos y espacio público” (BID, 2024).
El Plan de Vivienda “Mi Casa en Bogotá” es una Estrategia ambiciosa orientado a la atención de 75 mil hogares durante el periodo 2024 -2027. La SDHT ha diseñado un Plan sin precedentes orientado a: facilitar el acceso a una solución de vivienda VIS o VIP a los hogares más vulnerables través de la asignación de un subsidio reduciendo el déficit cuantitativo y cualitativo, y a reactivar el sector constructor de la ciudad que aún resiente los coletazos de la pandemia Covid-19. El diseño contempla un conjunto amplio de programas, bajo tres modalidades adquisición:
- Vivienda nueva: ‘Oferta preferente’, ‘Reduce tu cuota’, ‘Reactiva tu compra, reactiva tu hogar’, ‘Ahorro para mi casa’, ‘Adquisición de vivienda nueva rural’.
- Arrendamiento (con/sin opción de compra): ‘Mi ahorro mi hogar, ‘Arrendamiento social’, ‘Reúso’.
- Mejoramiento habitacional: ‘Mejora tu casa, habita tu hogar’.
Gráfica X. Programas de la SDHT

Fuente: BID adaptado de SDHT, 2024
El Plan ‘Mi Casa Ya’, que se financia con recursos Distritales, es novedoso en la medida en que responde desde la pertinencia y atiende las necesidades de las familias más vulnerables. Por un lado, los subsidios para hogares con ingresos de hasta 4 SMLMV contribuyen con el cierre financiero de quienes están comprando vivienda VIS o VIP (BID, 2024), y apoyan a quienes requieren recursos adicionales para lograr la escrituración de su casa durante el año de asignación del subsidio. Constituyen además un apoyo para aquellas familias que presenten dificultades para cubrir el total de su cuota de crédito mensual, o para quienes buscan realizar el pago del canon de arrendamiento y para materializar mejoras de habitabilidad que requiera la vivienda existente.
En paralelo, la SDHT ha puesto en marcha la Estrategia “Revitaliza tu barrio” que estima impactar 497 barrios y 1 millón de habitantes, impulsando criterios de calidad, seguridad y adaptación al cambio climático. La Estrategia (ver Capítulos 5, 6 y 7), que contempla la coordinación del sector hábitat: vivienda, servicios públicos y espacio público, se ha fijado dentro de sus objetivos principales: facilitar instancias de coordinación y gestión intersectorial (público-privada) que faciliten la toma de decisiones y la optimización de inversiones para transformaciones urbanas; reducir las brechas socioespaciales (acceso a espacio público, servicios públicos domiciliarios, equipamientos, etc.); y asegurar la asignación progresiva de subsidios de vivienda en zonas con potencial de ser revitalizadas, bien servidas y localizadas.
La ‘revitalización urbana’ precisa medidas de coordinación interinstitucional asociadas a la gestión y habilitación de suelo, así como al aprovechamiento y reúso de edificaciones para generar vivienda nueva o de alquiler. Por un lado, la SDHT viene avanzando en el cierre de procesos de gestión de suelo para 120 hectáreas; así como en la habilitación de otras 90 hectáreas adicionales hasta 2027 para ampliar la oferta de vivienda de interés social y prioritario en articulación con la aplicación de instrumentos de planeación y gestión. En paralelo, gestiones que fomentan el reciclaje de edificaciones subutilizadas, localizadas en zonas bien servidas y con potencial de albergar nuevas soluciones habitacionales. Se estima que la rehabilitación de edificaciones de uso comercial o industrial en desuso representa un potencial para recibir 100.229 unidades de vivienda (SDHT, 2024). El portafolio de vivienda en la ciudad, de la mano de la revitalización, incluye acciones que la SDHT ya viene adelantando, como impulsar proyectos de VIS y VIP en predios fiscales o privados, proyectos inmobiliarios mediante la habilitación de suelo en Actuaciones Estratégicas (AE), Unidades Funcionales (UF), Planes Parciales (PP), para soluciones habitacionales mediante el reciclaje de edificios públicos y privados (SDHT, 2024). El propósito de estas medidas es mejorar las condiciones de calidad de vida de las personas, fomentar comunidades más diversas e integradas, y reducir la segregación espacial.
La SDHT ha priorizado 20 espacios urbanos conocidos como ‘Polígonos de Revitalización’ (PR) a lo largo y ancho de la ciudad. La oportunidad de estas piezas de ciudad, desde la perspectiva de la vivienda, es acercar el mercado de la demanda y la oferta existente, gestionando cambios en la estructura pública, la mezcla de usos, y reduciendo los tiempos de desplazamiento mientras se impulsa el modelo de proximidad del POT. Ahora bien, para que la vivienda se consolide como eje central de la revitalización urbana en Bogotá, es necesario adelantar acciones como la identificación de predios aptos para la construcción de vivienda, de igual modo aquellas edificaciones existentes sujetas de aprovechamiento y localización de vivienda en área central, e incluso facilitar los trámites internos, donde la Ventanilla Única de la Construcción (VUC) puede jugar un importante rol en este propósito (BID, 2024).
En resumen, para afrontar el 'Gran desafío de la vivienda y la revitalización', la Alcaldía Mayor de Bogotá, con el liderazgo de la Secretaría Distrital de Hábitat (SDHT), ha implementado diversos instrumentos y estrategias, y como punto de partida se ha priorizado su rol central en el marco de la revitalización. A su vez, mediante la identificación de ‘áreas de oportunidad’, busca asegurar la llegada de vivienda en zonas que brinden condiciones adecuadas en sus entornos urbanos (obras de espacio público), bien servidas y conectadas.