En una ciudad con más de 8 millones de habitantes como Bogotá, son millones las situaciones de índole social que se presentan a diario. Desde relaciones arrendadores-arrendatarios complicadas, hasta obras de construcción que no cumplen con los mínimos estándares de calidad exigidos.
Para cada uno de esos escenarios la Secretaría Distrital del Hábitat, entidad que vela por mejorar el hábitat de la ciudad, tiene una respuesta. Y es precisamente la Subsecretaría de Inspección, Vigilancia y Control de Viviendas – IVC, la que se encarga de varias de estas funciones.
Al frente de esta dependencia está una profesional del derecho que conoce muy bien cómo llevar a cabo los procesos de inspección y de intervención en las comunidades, velando siempre por el cumplimiento de los preceptos legales y en defensa del bien común.
La abogada con especialización en Derecho Procesal de la Universidad Libre de Colombia, Lorena Solano Quintero, tiene bajo su responsabilidad esta misión que como ella misma dice está enfocada en «trabajar todos los días para que la comunidad pueda resolver sus necesidades».
«Un mejor mañana»
Cuando se habla del futuro, Lorena Solano tiene claro que, para la mayoría de los hogares de Bogotá esta definición pasa por la meta de comprar una vivienda digna.
Para lograr este cometido junto con su equipo de trabajo conformado por dos subdirecciones, se mantiene vigilante para evitar irregularidades y deficiencias constructivas en las soluciones habitacionales o para impedir los abusos por parte de algunos arrendadores y enajenadores de vivienda.
Para las familias que habitan en zonas de alto riesgo no mitigable, esta dependencia trabaja de forma coordinada y continua con las demás Subsecretarías de la entidad, para focalizarlas en el proceso de compra de vivienda propia.
«Todos los días conocemos problemáticas que, afectan el diario vivir y el entorno de las familias en Bogotá, pero tengo la certeza de que con la orientación que hacemos podemos encontrar la oportunidad para que estas comunidades tengan un techo donde descansar y donde puedan levantarse para ayudar a construir un mejor mañana para toda la ciudad de Bogotá», recalca.
«El hábitat es nuestro compromiso»
No solo se trata de orientar y acompañar a las comunidades para seguir la ruta que les permita obtener vivienda propia, IVC también tiene una responsabilidad enorme en la protección en las zonas de alta prioridad para el Distrito como los Cerros Orientales y todo el espacio público.
Las zonas de alto riesgo no mitigable que, no son más que áreas donde no es viable el asentamiento humano por el riesgo de deslizamientos en masa de la tierra, concentran una especial atención porque «tenemos la responsabilidad de evitarle a la ciudadanía todo lo que puede presentarse por estar en estas zonas» afirma.
Construcción con calidad
Desde IVC también se adelantan visitas técnicas a las obras en construcción, esto con el fin de garantizar que los procesos de edificación se realicen conforme a la norma, es decir, sin deficiencias como hundimientos, humedades, problemas en alturas o de conectividad para los servicios públicos.
Solo así se puede ofrecer a la ciudadanía la certeza de disfrutar de su vivienda sabiendo que, cumple con las condiciones de calidad que debe tener.
Otra de las funciones de vigilancia es la que tiene que ver con los arrendamientos en la ciudad. Esta responsabilidad se enmarca en hacer un acompañamiento a los arrendatarios para conocer de sus estados financieros y de sus actividades «para evitar afectación de la comunidad que tiene que acudir al arriendo como una modalidad de vivienda».
De esta forma, la Subsecretaría de Inspección, Vigilancia y Control de Viviendas aporta con su labor a la gran misión que tiene la Secretaría Distrital del Hábitat para seguir ayudando a las comunidades a mejorar sus condiciones de vida y a construir un mejor mañana y hacer de Bogotá el mejor hogar.
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