La acumulación y el mal manejo de basura es un problema que Bogotá ha visto crecer con los años. En la búsqueda de cambiar nuestros hábitos y entender que el buen manejo de los residuos beneficia a todos por igual y mejorar nuestra calidad de vida, desde el sector del Mochuelo, ubicado cerca al relleno Doña Juana, un grupo de niños impulsó un interesante reto.
La meta: aprovechar de mejor manera los restos que se producen en el hogar, mientras, al mismo tiempo, se conservan los métodos de autocuidado a raíz de la crisis ocasionada por la pandemia. Así, la campaña, La Basura No es Basura, contó en su lanzamiento con el acompañamiento de las secretarías de Hábitat y Ambiente, además de Cultura y la Unidad Administrativa Especial de Servicios Públicos -UAESP-.
Es válido mencionar que la capital ha hecho avances significativos en sus políticas y hábitos de reciclaje. Este creció considerablemente en el último año, al pasar del 18,73 % en 2019 a 24,23 % en 2020. Durante el año pasado se evitó que se enterraran más de 167.000 toneladas de residuos en Doña Juana lo que significa que la ciudadanía dejó de enviar al depósito más de 2.047 toneladas de residuos diarios.
Para esta ocasión, el reto busca, durante las próximas dos semanas, pasar de 8400 a 9000 toneladas de residuos aprovechadas a la semana. Al respecto, secretaria del Hábitat, Nadya Rangel, afirmó:
“Los depósitos de residuos son espacios muy importantes en nuestros lugares de vivienda y trabajo, la forma de darles un buen uso es dejando en este lugar todo correctamente clasificado (cartón, vidrio y plástico lavado y limpio). Así, ayudamos a nuestros recicladores a no clasificar material contaminado, reduciendo el trabajo manual que hacen a diario. Este acto sencillo de separar en la fuente demuestra nuestro compromiso con el ambiente”.
Por su parte, Carolina Urrutia, secretaría de Ambiente afirmó:
“Bogotá ha demostrado su capacidad para liderar poderosos cambios culturales que modifican el rumbo de nuestro presente y futuro. Ahora llegó el momento de hacerlo desde casa, en nuestros pequeños actos, entendiendo que la basura no es basura, separando en la fuente y tomando mejores decisiones sobre lo que consumimos y el manejo que damos a los residuos”.
Con la estrategia La basura no es basura, la administración busca que los ciudadanos conozcan más sobre la separación en la fuente, el aprovechamiento y el consumo responsable para que Bogotá continúe reduciendo la cantidad de residuos que llegan al relleno sanitario.
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